Políticas
23/9/2024
El Presupuesto 2025 desengancha las asignaciones familiares para licuarlas
El ajuste lo seguirán pagando las infancias pobres.
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Los aumentos de la AUH pasarán a ser discrecionales.
Javier Milei pretende cumplir la “regla fiscal” que incluyó en el Presupuesto 2025 a través de redoblar el ajuste contra el pueblo, mientras acrecienta los beneficios impositivos para los empresarios y anuncia que va a priorizar el pago de la deuda por sobre el resto de las erogaciones. La “ley de leyes” se ensaña particularmente con las infancias más empobrecidas, dado que los aumentos de las asignaciones familiares pasarán a depender de la discrecionalidad del Poder Ejecutivo.
El proyecto de ley de Presupuesto 2025 presentado por el presidente les quita a las asignaciones familiares su carácter móvil. Es decir, en caso de aprobarse, estas ya no aumentarán automáticamente en función de la fórmula previsional sino que las subas quedarán sujetas a la voluntad de Milei. Estamos hablando de prestaciones tales como la Asignación Universal por Hijo, la Asignación por Embarazo, la Ayuda Escolar AUH, Asignación Familiar por Hijo con Discapacidad, entre otras.
Sin lugar a dudas, el objetivo de desenganchar los aumentos de la ayuda social a una fórmula determinada es licuar esas partidas. Así las cosas, las asignaciones tendrán el mismo destino que el presupuesto devengado en el exPotenciar Trabajo, el cual, al desprenderse de la evolución del salario mínimo, tuvo una caída real del 60% en los primeros ocho meses del año según los datos de la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Como vemos, el gobierno que llevó la pobreza al 55% se propone multiplicarla recortando la magra asistencia social que recibe la población más vulnerable. A todas luces, el compromiso de superávit financiero rubricado en el presupuesto es a costa de más sufrimiento para las niñeces de los barrios postergados, cuyas madres dependen de esas asignaciones para darles de comer.
Esta vocación hambreadora de Milei se completa con el desabastecimiento a los comedores populares que garantizaban la cena del millón de chicos que ahora de se va a dormir sin comer. Para prosperar en sus planes reaccionarios, el gobierno criminaliza a las compañeras y compañeros que sostienen esas ollas, convirtiendo a víctimas en victimarios a fin de desarticular la organización barrial.
Por lo tanto, cobra absoluta relevancia que el movimiento popular enfrente la persecución contra las organizaciones piqueteras. En ese sentido, la movilización del martes 24 de septiembre frente a los tribunales de Comodoro Py constituye una cita irrenunciable en la lucha por el sobreseimiento de todos los compañeros procesados en el marco de esta causa infame.
