En una entrevista publicada por DiarioAr (5/9) la principal precandidata bonaerense del Frente de Todos, Victoria Tolosa Paz, cargó contra la izquierda repitiendo un viejo latiguillo de que “los troskos son funcionales a la derecha”, y que “como decía Néstor (Kirchner) a la izquierda de nosotros está la pared”. Al cruce le salió Romina Del Plá, precandidata a diputada por el Frente de Izquierda Unidad: “qué caradura es Victoria Tolosa Paz, ‘hacerle el juego a la derecha’ es sostener a Berni luego de la desaparición seguida de muerte de Facundo Castro”, refutó.

De hecho, en la misma entrevista la candidata oficialista fue consultada por el rol de Berni en el gobierno, a lo que respondió que no hay que cargar tintas contra el ministro. Por supuesto, no mencionó a Facundo Castro ni a los casos de gatillo fácil en manos de la maldita Bonaerense en los últimos dos años. Tampoco habla de los violentos desalojos contra familias sin techo, protagonizados por un ejército policial comandado por el titular de Seguridad de Kicillof.

No es casualidad que la candidata de la especulación inmobiliaria y los countries de City Bell declare contra la izquierda. El cuento de que el trotskismo y el Frente de Izquierda Unidad es funcional a la derecha es un intento de preservar la grieta entre las fuerzas que gobiernan y gobernaron hundiendo al país en la miseria. Es una forma de extorsionar a un sector del electorado, defraudado por las medidas y el programa antipopular del Frente de Todos que prometía sacarnos de la crisis macrista pero profundizó el ajuste. Buscan mantener una falsa polarización entre quienes tras las elecciones van a pactar el acuerdo con el FMI, como ya lo anticipó Massa hace unos días.

No es una particularidad bonaerense. La misma sintonía que expresó en la Capital Leandro Santoro, quien arrancó la campaña defendiendo el uso de pistolas Taser luego de que efectivos policiales balearan al músico Chano Carpentier, y recientemente se posicionó a favor bajar la edad de imputabilidad. Como dijo Gabriel Solano “La batalla cultural se la ganó Larreta”.

La orientación social del Frente de Todos es dictada por la clase social parasitaria a la cual representa, empezando por los reclamos antiobreros de la burguesía nacional, como la reforma laboral para barrer con los convenios colectivos y un acuerdo con el FMI para acceder al crédito internacional. Es esa orientación social la que comparte con la derecha. Incluso, el peronismo se presenta como una mejor canal para viabilizar ese programa contra las masas, por contar con el sostén de la burocracia sindical de la CGT y de las organizaciones sociales integradas al Estado.

Por eso, el único voto consecuente contra el ajuste y la derecha es al Frente de Izquierda Unidad. Los dichos de que “a la izquierda del peronismo está la pared” muestran que este hecho golpea en la base social del Frente de Todos. Es una vil infamia que intenta borrar el signo de un kirchnerismo que asumió en 2003 como enemigo del movimiento piquetero, gobernó en rescate de la deuda defaulteada de 2001 y pagó en efectivo 10.000 millones de dólares al FMI, mientras se expandía el trabajo precario. Por eso en la vereda de en frente estuvimos los compañeros de Mariano Ferreyra, asesinado en 2010 por la burocracia de la Unión Ferroviaria y la complicidad policial, en defensa del negocio de la tercerización.

Por lo demás, durante los cuagtro años de gobierno de Macri fue el peronismo quien votó más de 100 leyes de ajuste, mientras la burocracia sindical y piquetera garantizaban la gobernabilidad. En la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal cogobernó en la Legislatura con el Frente Renovador de Sergio Massa. La propia candidatura de Tolosa Paz expresa que al FDT lo único que le queda de popular, con suerte, es el relato.

El Frente de Izquierda se estructuró en la Argentina hace once años con el objetivo de reagrupar al movimiento obrero y los luchadores en base a la independencia política, en oposición a la colaboración de clases y por la superación del nacionalismo de contenido burgués.

La situación dramática que afrontamos lxs trabajadores en el país confirma la vigencia de esta pelea, aunque Tolosa Paz pretenda anularla. Vamos con el FIT-U en todo el país.