Políticas

15/6/2022

¿La inflación entró en una tendencia descendente?

Permanece dentro de márgenes récord. D'Elía quiere esconder la responsabilidad del gobierno

Luis D´Elía sostiene que la inflación estaría mostrando una tendencia decreciente.

Luego del informe que difundió el Indec con los datos de inflación de mayo varios representantes del oficialismo alegaron que los niveles inflacionarios estarían mostrando una tendencia decreciente. Buscan disimular que la corrida inflacionaria permanece dentro de márgenes récord y, sobre todo, que su política económica vaticina un alza general de precios que seguirán perforando el bolsillo popular.

A su vez, los datos del Indec dan cuenta de que hubo un 64% de aumento en el rubro de Alimentos y bebidas no alcohólicas, que incluirá en junio el aumento de los productos del programa Precios Cuidados autorizado recientemente por el gobierno, y casi un 80% en prendas de vestir y calzado. Estos rubros explican casi el 35% de la inflación y conforman la mayor parte de cualquier canasta básica, por ser elementos esenciales del consumo de cualquier familia tipo. A esto también se suman aumentos en Atención médica y gastos para la salud (7,2%), Indumentaria (6,3%) y Educación (5,8%). De esta manera, los primeros que se ven perjudicados son los trabajadores que dependen de su salario para poder adquirir esos productos y servicios. Con paritarias que promedian el 60%, en cuotas, los salarios se la ven negra contra una proyección anual de los precios de más del 70%.

También se vienen los aumentos de alrededor del 20% autorizados para tarifas de servicios públicos que empezaron a regir a partir de junio y cuentan con la introducción de una fórmula para su actualización basada en el Coeficiente de Variación Salarial (CVS) del año anterior, asegurando así que año a año tendremos nuevos aumentos. En la misma línea, advierten que las fuertes subas de alimentos en los primeros días de este mes, especialmente en carnes, leches y harinas, llevarán presión al indicador de junio y se suman también los aumentos en combustibles. “Luego de la difusión de la inflación de mayo, las consultoras económicas ya estiman que en junio el índice mensual también se mantendrá por encima del 5%” (Infobae 15/6)

Otro factor agravante es la aceleración de la devaluación, acicateada por la corrida al dólar, a partir de la venta masiva de los títulos del Tesoro que indexan por inflación. Es un mecanismo de presión del gran capital para forzar una depreciación del peso, que beneficiaría en especial a las multinacionales exportadoras y licuaría de inmediato los salarios en pesos. Ante este golpe de mercado, el gobierno salió al rescate de los bonos en pesos comprándolos a pérdida con la plata de la Anses y del Banco Central e incluso a vender los dólares de las reservas. Además, también anunciaría un nuevo aumento las tasas de interés encareciendo los créditos y el consumo.

Esto demuestra la impostura de aquellos que se vanaglorian de una reducción ínfima de los índices inflacionarios, que no aplaca en absoluto el ataque a las condiciones de vida que viven las masas laboriosas del país y que esconde la progresión de los aumentos irrisorios en las distintas esferas de las necesidades básicas. Es el caso de Luis D´Elía, quien arremete contra el movimiento piquetero que continúa ganando las calles por trabajo, salario y asistencia social, en el marco de la campaña por un gran paro nacional. Este es el planteo que le han llevado a la CGT y a la CTA Autónoma, el que desarrollan con su actual plan de lucha y al que se pliegan distintos sectores sindicales combativos, que también libran sus propias peleas, como el Sutna.

El pacto inflacionario y devaluatorio sellado con el FMI continuará agravando las condiciones de vida de los trabajadores. Esto plantea la necesidad de pelear por recomposición general de los salarios, tarea para la cual el movimiento obrero debe intervenir para enfrentar este ataque y defender su poder de compra, reclamando un salario mínimo de $180.000 y aumentos salariales indexados a la inflación. En función de ese objetivo, corresponde pelear por un paro nacional, seguido de un plan de lucha.