En el Banco Galicia de diciembre de 2019 a la fecha se redujo la nómina de trabajadores en más de 500 personas: más de un 10% del total al cierre del balance 2019. La baja de personal estuvo caracterizada por enormes planes de retiros voluntarios plagados de presiones y aprietes, cierre de sectores completos y, bajo la figura de la fusión, el cierre de numerosas sucursales.

En forma simultánea, se avanzó en un feroz proceso de flexibilización. Quienes continúan en las áreas y sucursales que siguen en pie tienen cada vez más responsabilidades, y métricas, claro está. El del contact center es un caso paradigmático: de ocho sectores quedó solo uno, y de más de 400 trabajadores hoy siguen en la línea menos de 100. Esta dinámica se replica en todo el banco, que en sus informes de actividad refleja trimestre tras trimestre una creciente reducción de personal y enormes ratios de ganancia.

Galicia conecta prefer, la nueva avanzada

En los últimos días, los trabajadores de Galicia conecta con clientes de renta prefer a cargo fueron anoticiados que la cartera no va a seguir siendo tomada por el área, y que deben buscarse un puesto en sucursales. Deberán conseguirlos en las búsquedas tradicionales, que, además de insuficientes en relación a su número, dejan atada su continuidad laboral al sobrepaso de las diversas entrevistas y trabas que tienen estos procesos. Quienes puedan continuar lo harán, quienes no, quedarán librados a su suerte y a la poste serán presionados para arreglar su desvinculación. Nada nuevo bajo el sol, muchos compañeros y compañeras de diversas áreas corrieron la misma suerte.

¿Dónde están?

Mientras esto ocurre, y otros bancos realizan paros por mucho menos, la comisión interna brilla por su ausencia. En los casos en que intervienen, cuando no justifican la línea de ajuste del banco, lo hacen de manera individual; siendo que a la vista de todos la problemática es general. ¿Para qué lado juegan?

A su vez, el sindicato sigue proponiendo medidas aisladas cuando, nuevamente, está lógica se aplica en toda la banca. Es lógico: el ajuste general que el Frente de Todos niega estar llevando a cabo (pero todos vemos día a día) no puede ser asumido en forma integral desde el sindicato que encabeza uno de sus candidatos principales en las últimas elecciones.

Basta de ajuste. Estabilidad para todos los trabajadores

La situación en la que se encuentran los trabajadores del Galicia pone de relieve la necesidad de una organización independiente que los represente. A la reducción de personal de a cientos y la flexibilización hay que ponerle un freno. Vamos por asambleas para votar acciones gremiales progresivas por la defensa de los puestos de trabajo y las condiciones laborales.

Continuidad de todo el staff de conecta en sus puestos. Garantía laboral para los trabajadores de áreas y sucursales cerradas. Basta de flexibilización y presiones. Asambleas en todas la áreas y plan de acciones gremiales. ¡No al ajuste del Galicia!

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