Políticas
22/5/2025
Fracasó la sesión de Diputados por jubilados, los inundados y la investigación de $Libra
La “oposición” colaboró con otro triunfo de Milei.

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Un Congreso enemigo de los trabajadores.
Este miércoles 21 de mayo finalmente fracasó la sesión convocada por distintos sectores de la oposición para tratar los proyectos jubilatorios, una emergencia nacional por las inundaciones en la provincia de Buenos Aires, y dirimir la elección de autoridades de la comisión investigadora por la estafa Libra -que había quedado empantanada luego de un empate técnico entre el oficialismo y sus aliados, por un lado, y los bloques que la quieren hacer funcionar por el otro. La convocatoria a la sesión fue firmada por tres diputados de Unión por la Patria, tres de Encuentro Federal (bloque de Pichetto) y tres de Democracia para Siempre (los radicales de Lousteau), que horas antes de la misma metieron por la ventana la designación de autoridades de AGN -una rosca que terminó de dinamitar las posibilidades de conquistar el quórum.
Sabido era que la sesión por los jubilados sería boicoteada por el oficialismo y no contaría con los diputados propios y aliados: La Libertad Avanza, el PRO, los tucumanos de Jaldo (ex Unión por la Patria) y los peronistas de Innovación Federal. LLA, de hecho, venía cajoneando el tratamiento de los proyectos jubilatorios, de los que sólo se pudo obtener dictamen gracias a un emplazamiento votado en una sesión previa que obligó a Espert como presidente de la Comisión de Presupuesto a tratar los expedientes respectivos para poder dictaminar. El mismo mecanismo se utilizó para la emergencia en discapacidad, cuyo dictamen probablemente sea incluido en una próxima sesión opositora.
Sin embargo, los propios bloques convocantes contribuyeron a la falta de quórum. De los 129 diputados que se necesitaban para garantizar la sesión hubo sólo 124 presentes. Entre las ausencias que ayudaron al gobierno de Milei estuvieron en primer lugar diputados y diputadas de los gobernadores alineados con el oficialismo, como es el caso de Llaryora (el PJ cordobés que “inspira” a Leandro Santoro), que ausentó a sus tres diputados: Torres, Gutiérrez y García Aresca. Unión por la Patria tampoco pudo garantizar la asistencia completa: faltaron cuatro diputados de la provincia de Santiago del Estero (Campitelli, Daives, Gómez y Herrera), gobernada por Zamora, que dijeron que su vuelo se había retrasado; así como los dos catarmaqueños que responden al gobernador Jalil (Ávila y López Rodríguez), quienes vienen aportando votos o ausencias clave a tono con las conveniencias de los libertarios.
Otro tanto ocurrió con el bloque de Pichetto, que además del faltazo de los cordobeses tampoco sentó en el recinto al chubutense cercano al gobernador Ignacio Torries, Jorge Ávila. Por el lado de los radicales de DPS se ausentaron el diputado Rizzotti de Jujuy, gobernada por Sadir; y Polini, de la Chaco de Zdero.
Como dijimos, la incorporación a último minuto del tratamiento de las autoridades de la Auditoría General de la Nación (AGN) -que acordaron el PJ, el bloque de Pichetto y Democracia para Siempre- introdujo una nueva cuña contra las posibilidades de un quórum de por sí muy ajustado. Si desde la UCR podía haber alguna chance de que habiliten el quórum a la sesión por los jubilados, se terminó de dinamitar cuando el PJ y el bloque de Pichetto acordaron entre ellos un lugar en los cargos directivos para cada uno. El radicalismo está disputando un lugar propio en el organismo, y a la sesión sólo terminó yendo Julio Cobos. El diputado de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, dijo minutos antes de la sesión en la Comisión de Asuntos Constitucionales que su bloque no daría quórum porque no acordaban con tratar tema AGN. Finalmente se sentaron, posiblemente a sabiendas de que la sesión no conquistaría el número para sesionarr.
Vanina Biasi, diputada del Partido Obrero en el Frente de Izquierda, denunció que “la falta de quórum y la caída de la sesión especial convocada para votar temas jubilatorios urgentes como la moratoria y el aumento del bono; una emergencia, también perentoria, para las miles de familias que quedaron bajo el agua en la provincia de Buenos Aires; la designación de autoridades para investigar la criptoestafa y la designación de autoridades de la Auditoría General de la Nación; muestra la distancia que hay entre los diputados y el pueblo que hasta ahora ha manifestado su descontento luchando como lo hacen los jubilados y ausentándose de las elecciones legislativas”.
Es evidente que un Congreso que no reúne quórum para tratar temas de jubilados, para ayudar a los inundados y para investigar a Milei y su mafia es un Congreso enemigo de los trabajadores.
La necesidad de reforzar la lucha para conquistar las reivindicaciones
Los proyectos jubilatorios incluían la prórroga de la moratoria previsional, que el gobierno dejó caer el pasado 23 de marzo dejando sin posibilidad de jubilarse y sin ingresos a 7 de cada 10 trabajadores y 9 de cada 10 trabajadoras. Junto con ello se iban a tratar distintos dictámenes relativos al aumento del bono y del haber mínimo previsional, aunque el que contaba con mayoría de firmas -el del PJ de Unión Por la Patria- contempla un incremento mísero de apenas 7,8% de los haberes y $115.000 de “máximo” para el bono (y estaban negociando bajarlo aún más). También se integra un aumento muy módico de la Puam.
En el caso del Frente de Izquierda tenemos dictámenes propios de minoría que establecen la continuidad de la moratoria, un incremento de la jubilación mínima para que sea equivalente al costo de la canasta básica calculada por la Defensoría de la Tercera Edad en $1.200.523, y el rechazo a la Puam con la defensa de un régimen de jubilación universal que parta de reponer los aportes patronales y defender a la jubilación como un salario diferido y con 82% móvil.
El FIT también presentó su propio proyecto de emergencia para asistir a las familias inundadas de la provincia de Buenos Aires, que contrasta con los presentados por los bloques políticos capitalistas. Desde el PJ hasta el PRO y los radicales armaron proyectos que le otorgan plenas facultades al gobierno de Milei, sea a través del jefe de gabinete Francos (en el caso de Unión por la Patria) o al ministerio de Bullrich (en los demás) para reasignar partidas presupuestarias a su antojo -algo que por parte de este gobierno bien pueden ser a expensas de derechos del pueblo como salud o educación. El proyecto de los radicales de Democracia Para Siempre es el que más lejos va en su carácter propatronal, poniendo en primera plana la asistencia a las empresas con medidas como la exención del pago de aportes previsionales -los aportes jubilatorios de los trabajadores: “bien, gracias”.
El dato más relevante de la jornada, junto con la caída de la sesión, fue el brutal operativo represivo desplegado por Bullrich, militarizando el Congreso con una cantidad inusitada de agentes y camiones de Gendarmería, para reprimir una vez más la ronda de las y los jubilados. Eso ocurrió mientras se realizaban las expresiones de minoría posterior a la caída de sesión.
Vanina Biasi denunció en su intervención que “hoy el único que festeja es el presidente Javier Milei, que mandó a militarizar una vez más el Congreso contra la movilización de los jubilados, a los que les siguen negando la moratoria y un incremento miserable del bono que este gobierno tiene congelado hace 17 meses. La protesta es un derecho que no les van a poder arrebatar. Hoy mismo el gobierno publicó los decretos 340 y 342, que impiden el derecho a huelga y atacan el derecho a la organización sindical de los trabajadores. Pero le vamos que responder como hacen en Tierra del Fuego con un paro general en defensa de miles de puestos de trabajo, o como hacen en Morvillo con una ocupación que ya lleva más de 80 días”.
La herramienta para derrotar la brutal ofensiva de Milei y sus cómplices contra el pueblo no es este Congreso, como tampoco una CGT traidora que hoy tiene a su titular Héctor Daer paseándose por la Casa Rosada mientras entrega de forma criminal el salario de los trabajadores con paritarias de hambre. La salida la tenemos que conquistar como pueblo, con la huelga general hasta derrotar a Milei y todos sus cómplices.


