José Liguen, secretario general de Uatre de Río Negro y Neuquén y exlegislador provincial de Río Negro, mediante una carta documento teledirigida al sector de rurales organizadxs de Villa Regina, que por elevación intenta ser un mensaje a toda organización y lucha de trabajadores y trabajadoras, recrimina e intenta prohibir la utilización del logo del sindicato Uatre, como así también advierte en tono amenazante no hacer mención a su figura en redes, o las de sus socios, patronales y políticos. Estas amenazas intentan criminalizar al sector independiente de rurales en lucha adjudicándoles una especie de desobediencia sindical.

Lo que Liguen no menciona es que los reclamos han salido a la luz y de manera independiente, y se hacen sentir cada vez más ante la parálisis de su actual dirección sindical, acoplada hasta la médula a la patronal y al Estado. Así Liguen acaba de evidenciar por un lado su preocupación por la organización independiente que se viene gestando en Uatre, y por otro que es un peón fiel de la patronal y el Estado. Este atacado sector combativo, organizado y que lucha de manera independiente de la actual conducción, giró a la oficina personal de dicho secretario general la semana pasada un sobre por correo argentino con más de 250 firmas y una nota donde exigen la renuncia de Pablo Cariman, el secretario general de la seccional Nº 247 de Villa Regina, y nuevas e inmediatas elecciones. Acompañaron dicha nota y las firmas una denuncia penal de un trabajador rural amenazado en diferentes oportunidades y por diferentes medios por una patota en parte identificada luego de que comience a acompañar la lucha por la zona desfavorable, y la noticia de un medio de comunicación que anuncia que durante el corte del 22 de agosto sobre ruta 22 la dirección de Uatre había sacado su apoyo a los y las trabajadoras autoconvocadas.

Se agrieta la contención de la burocracia de la fruta camino a la cosecha

La carta documento en cuestión, de la burocracia a este sector de trabajadores y trabajadoras independientes, representa un nuevo salto en lo que se ha convertido en una grieta cada vez más grande entre ambos sectores, pero también en un nuevo salto por parte de la burocracia que no logra contener a gusto y placer. Es decir, de un lado la burocracia que busca contener por mandato patronal, y de otro los y las trabajadoras organizadas que intentan rasgar cada vez más dicha contención, luchando contra el Estado y la patronal que niega sus derechos. Así vienen llevando adelante todas las medidas posibles para recuperar la seccional de Villa Regina y ponerla al servicio de las luchas.

En gran medida el ataque de la burocracia consiste en intentar colocar un bozal legal a los reclamos de rurales que inundan las redes sociales y los medios de comunicación, incluso nacionales y provinciales, y que son muchísimos. Desde la lucha por el reconocimiento zona desfavorable que los secretarios generales sí cobran, hasta los reclamos por las paritarias de pobreza firmadas a sus espaldas y la falta de la cobertura de obra social. Un debate que se instaló en este sector, y que se volvió reclamo y bandera son los bajísimos salarios que este sector cobra.

De conjunto la burocracia de la fruta, que pasó del “no vamos a levantar las cosechas” al “no hay que perjudicar a las economías regionales” toma nota de la sostenida masividad que ha logrado adquirir el reclamo por la zona desfavorable, detrás del cual han surgido otros. Las relaciones carnales que existen y han existido entre las actuales conducciones de la fruta, y el peronismo y Juntos Somos Río Negro han permitido sacar importantes conclusiones a los y las trabajadoras de las chacras y empaques, pero también tomar importantes medidas. Se han llevado adelante varios cortes de rutas, marchas y piquetes, con epicentro en Villa Regina, como parte del plan de lucha con el cual se votó continuar la semana pasada. Camino a la cosecha, y con miles y miles de trabajadores rurales y de empaque llegando a Río Negro y Neuquén desde el NOA, las asambleas tienen que masificarse por chacras y por empaques, debatiendo la realidad que atraviesan los y las trabajadoras de estas actividades, y una salida, que como se debate tiene que ser la huelga general.

Basta de aprietes. Por delegadxs anti burocráticos y por la huelga general

Camino a la cosecha, y las elecciones de delegados en varias chacras y varios empaques de Río Negro y Neuquén durante la cosecha los debates se profundizan entre los y las trabajadoras. A medida que se está luchando por el reconocimiento inmediato del plus salarial de la zona desfavorable, contra el trabajo en negro e infantil, y por una obra social que funcione, este sector antiburocrático de rurales y empacadores se ha dado cuenta también que tiene que luchar por sacar a las burocracias de las conducciones sindicales, que están en el camino opuesto al de los y las trabajadoras. En ese sentido se han puesto como horizonte asambleas soberanas y democráticas que exijan a los sindicatos una nueva elección de delegados y delegadas en cada lugar de trabajo, para organizar y resolver, pero también, en el caso de rurales la renuncia del secretario general de Uatre Villa Regina.

Ante la parálisis y el sucesivo intento de contención de las burocracias de la fruta, y las sucesivas amenazas desde el Partido Obrero repudiamos estas acciones antidemocráticas y patoteriles de parte de la burocracia sindical. En respuesta, las elecciones de delegadxs tienen que ser una exigencia de los y las trabajadoras, que servirá para seguir organizando y alimentando la lucha por la zona desfavorable y todos los derechos. En ese sentido se estará también más cerca de concentrar fuerzas para poder arrancar una huelga general que desde este sector independiente, democrático y combativo ya vienen exigiendo.

Zona desfavorable ya. Por delegadxs antiburocráticos para luchar por todos los derechos y recuperar los sindicatos de Uatre, Soefrnyn y Sthimpra a manos de lxs trabajadoxs.

Por un plenario general de todo el movimiento obrero de la fruta para organizar y conquistar la huelga general, por todos los derechos. Todo el apoyo.