La presidenta del PRO, Patricia Bullrich, eligió al intendente lanusense Néstor Grindetti como su candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires, para batallar en las Paso contra Diego Santilli, quien es el alfil bonaerense de Horacio Rodríguez Larreta, el otro presidenciable de Juntos por el Cambio.

El anuncio profundizó la crisis en el PRO. Bullrich eligió a Grindetti en detrimento de otros elementos: Cristian Ritondo, Javier Iguacel y Joaquín De La Torre. El más golpeado por esto fue Ritondo, que aparecía como favorito en las encuestas. Al parecer, tanto Ritondo como Iguacel aceptaron la decisión de la lideresa del PRO y decidieron continuar bajo su ala. El destino de De La Torre no está claro, algunos dicen que seguiría ese mismo camino, y otros que podría pasar a integrar las filas de La Libertad Avanza, la coalición liderada por Javier Milei, si es que este lo llama.

Existen varios motivos por los cuales Bullrich habría elegido a Grindetti como su delfín. El intendente de Lanús es un hombre muy cercano a Mauricio Macri. Trabajó en el directorio del Grupo Socma (perteneciente a la familia del expresidente), el cual fue beneficiario de la estatización de la deuda privada que llevó adelante Domingo Cavallo, el mentor de Milei, cuando fungía como jefe del Banco Central bajo la dictadura militar.

Grindetti integra el PRO desde 2007. Fue ministro de Hacienda porteño (2007-2015) bajo la intendencia de Macri y también director del Banco Ciudad. Asimismo, gobierna Lanús desde 2015. En 2010, cuando dirigía Hacienda, emitió deuda por 450 millones de dólares; armó un negociado jugoso para los buitres. Grindetti fue imputado por enriquecimiento ilícito, estuvo involucrado en los Panamá Papers. También carga con causas judiciales por la quiebra fraudulenta de una empresa del Grupo Macri y por evasión fiscal en Brasil. Por esto último tuvo un pedido de captura internacional.

Otra de las razones de Bullrich es la inserción territorial que posee Grindetti. El alcalde mantiene relaciones con sectores peronistas, aceitadas por Diego Kravetz (su mano derecha) a través del agrupamiento “Hacemos”. También ha tejido vínculos con Martín Insaurralde, el Jefe de Gabinete del gobernador Axel Kicillof. Bullrich ve a Grindetti como una vía para ganar influencia en la tercera sección de la provincia de Buenos Aires, que está dominada por el peronismo.

Grindetti apuesta a que una candidatura presidencial de Bullrich le dé un empujón para ganarle la interna a Santilli. Esto explica su rechazo al desdoblamiento electoral que está barajando Kicillof.

La política de Grindetti en Lanús

Bullrich dice que Grindetti es un símbolo de “la lucha contra el narcotráfico” y “mejoró la vida de muchos bonaerenses”. Esto no se corresponde con la realidad. En Lanús, en barrios como Monte Chingolo, Villa Caraza y Villa Jardín operan búnkers narco con la complicidad de los distintos aparatos policiales y del municipio comandado por Grindetti. Asimismo, el intendente ha venido desarrollando una política represiva contra los vecinos que reclaman tierra y vivienda y contra los vendedores ambulantes.

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Además, Grindetti es un negrero. En el municipio de Lanús impera la precarización laboral. Grindetti les viene otorgando a los trabajadores municipales aumentos salariales por debajo de la inflación; para ello cuenta con la complicidad de la burocracia sindical del Sindicato de Trabajadores Municipales de Lanús (Stml) y el Sindicato de Empleados Municipales de Lanús (Semla). Desde abajo, los municipales de Lanús fueron al paro contra esta política de ajuste.

En el distrito, más en general, los derechos de los trabajadores son atacados sistemáticamente. “Lanusita” se convirtió en un polo gastronómico donde el trabajo precario es la norma. Incluso este proceso ha adquirido, en algunos casos, características más degradantes: recientemente fue detenido un empresario (Geoland S.A) que tenía trabajadores encerrados en una jaula y que les pagaba a sus empleados salarios que partían de los $60.000. Esto se descubrió a partir de una denuncia por actividades contaminantes (una práctica patronal común en Lanús). La causa terminó por revelar una red de trata de personas.

En Radio Mitre, como candidato, Grindetti se pronunció a favor de descentralizar la educación, la salud y la seguridad a los municipios. Es decir que un eventual gobierno suyo no se haría cargo de garantizar los derechos básicos de los bonaerenses, sino que buscaría pasarles la factura a los municipios, sin transferir recursos. Se trata de un reforzamiento del ajuste fondomonetarista que el gobierno del Frente de Todos está ejecutando contra la clase obrera. Cabe destacar que en la Legislatura Bonaerense, el FDT y JxC son socios a la hora de aprobar leyes (presupuestos provinciales, por ejemplo) que atentan contra los intereses de los trabajadores.

Los trabajadores de la provincia en general y de Lanús debemos organizarnos de manera independiente para que la crisis no se descargue sobre nuestras espaldas.

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