En el curso de estos días de creciente apertura para que las empresas vuelvan a la actividad, amplios sectores de trabajadores son protagonistas de importantes luchas que enfrentan el ataque brutal que han lanzado los gobiernos y las patronales apoyados en la crisis que potenció la cuarentena, para hacer retroceder años las condiciones de vida y de trabajo.

El ataque combinado de las patronales, el gobierno nacional y los provinciales y municipales es brutal. La crisis ya llevó a la pérdida de casi 300 mil puestos de trabajo formales aunque está en vigencia la prohibición de despidos y la doble indemnización, y quieren imponer el congelamiento y aún la reducción salarial por todo el año con la eliminación de las paritarias, que se suma a los descuentos de los meses de la pandemia que acordaron las distintas burocracias sobre los salarios y las suspensiones obligadas por la cuarentena.

A la cabeza de las aguerridas luchas para enfrentar esta ofensiva están hoy, entre otros, los choferes, los trabajadores de la Salud, los docentes, los explotados trabajadores rurales, los trabajadores de fast food de Wendy’s y KFC, los estatales y municipales de Mendoza y Córdoba y los metalúrgicos fueguinos que protagonizaron una rebelión de las bases contra la patronal negrera de New San y contra la burocracia del sindicato.

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Los conflictos de la semana – Anexo al Informe N°12 del Observatorio de los Trabajadores

Una dirección de lucha

Un elemento distintivo de estas peleas que están tomando no solo profundidad sino una amplitud creciente, extendiéndose a muchos distritos y provincias, es que las mismas están impulsadas y organizadas en su inmensa mayoría por sectores de activistas que están surgiendo, a la luz de la traición del conjunto de la burocracia sindical que se ha colocado abiertamente del lado de las patronales y los gobiernos ajustadores, y por los sindicatos que han sido recuperados de esas direcciones que activan contra las luchas de los trabajadores.

En este cuadro, es una tarea vital del clasismo y de la izquierda la pelea por la independencia política de los sectores del activismo que van surgiendo para organizarlos y delimitarlos de la burocacia sindical y de los gobiernos y corrientes del nacionalismo burgués.

Los choferes de colectivos de distintas ciudades del país llevan adelante paros, movilizaciones y piquetes en reclamo de salarios adeudados y condiciones de seguridad en las tareas riesgosas que realizan, La situación laboral se agravó no solo en el interior sino también en el AMBA, porque la actividad en los colectivos se ha convertido en otro de los grandes focos de contagio y expansión de la pandemia. Hay ya más de 100 contagiados y 3 trabajadores muertos en más de 50 líneas de colectivos, mayormente del Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba).

En la 202 de la zona de Berisso-La Plata, hubo 12 contagios, y debió ser suspendido el servicio y otro tanto en la línea 21, también del Amba y la 60, de CABA y Gran Buenos Aires, donde ya hay más de 10 contagiados. Esta situación se debe a que las patronales de la mayoría de las líneas incumplen las medidas de seguridad en la mayoría en las cabeceras y unidades como ha sido denunciado por los trabajadores.

En Córdoba capital e interior, en Rosario y en Bariloche, entre otros puntos del país, los trabajadores de base han tomado en sus manos la lucha, la han sacado a la calle, la han convertido en activa con piquetes y movilizaciones y han mostrado un creciente despegue de las burocracias de las UTA locales que han sido denunciadas públicamente por los trabajadores por su rol propatronal. En Córdoba realizaron esta semana una olla popular en la puerta del sindicato en repudio a la dirección del gremio y en Bariloche debieron enfrentar a la UTA local que actuó de carnera contra el paro de los choferes.

Pero la fuerza del movimiento obligó a la UTA nacional a decretar un paro de todo el interior que, por supuesto, no se ocupó de garantizar en su cumplimiento y continuidad.

En el caso de los trabajadores de la Salud, la jornada de lucha es impulsada por sindicatos de salud como la Fesprosa; la combativa UTS de Córdoba; algunas seccionales de la Cicop, de médicos; ATE Garrahan y también por importantes agrupamientos como la Asamblea de Residentes y Concurrentes de CABA y la lista del Frente de Recuperación Gremial (AMM) y  se lleva a cabo en reclamo de reapertura de la paritaria y de equipos de protección personal de calidad cuando crece sin pausa la cantidad de contagiados entre los trabajadores de la Salud. También por licencia para el personal en situación de riesgo, contra la precarización laboral, que hoy abunda en el sistema público de salud y por el pago completo del bono a los trabajadores de Salud.

Los Suteba Multicolor realizaron un plenario masivo, del cual participaron más de 300 docentes de 40 distritos bonaerenses donde se aprobó un paro-apagón virtual del 15. La iniciativa fue resuelta por las seccionales de Matanza, Ensenada, Marcos Paz, Bahía Blanca, Tigre, Escobar y General Madariaga, precedida de reuniones de delegados virtuales en todas ellas, por las reivindicaciones salariales y de condiciones de trabajo que vienen exigiendo desde hace meses con distintas medidas de lucha ante la parálisis de la burocracia encabezada por Roberto Baradel.

Los reclamos son, entre otros, la cobertura de cargos, el rechazo a un congelamiento salarial, un salario básico de $45.000, la defensa de la obra social IOMA que está siendo vaciada y de la caja provincial IPS, que el gobierno de Kicillof quiere “armonizar” con el Anses y liquidar derechos jubilatorios históricos de la docencia. Y la solución de los problemas de infraestrucutra que siguen planteados en toda la provincia.

A esta pelea se le suma la de los docentes universitarios organizados en la AGD-UBA que realizaron un importante paro virtual el pasado 3 de julio para enfrentar la política de congelamiento salarial y los demás reclamos de los trabajadores del sector.

La intervención de nuevos sectores

Este proceso de aparición de un activismo que toma en sus manos la tarea de organizar las luchas contra la barbarie que quieren imponer los gobiernos y las patronales, ha dado lugar a la organización de sectores rezagados en la participación sindical y superexplotados por patronales negreras. A los que ya comenzaron hace varias semanas como la juventud de los Repartidores y a las compañeras del Personal doméstico, ahora se le sumaron los también jóvenes de las empresas de fast food, como Wendy´s y KFC, que eligieron a sus propios representantes y repudiaron a la dirección sindical de Pasteleros.

Los trabajadores rurales de Villa Regina que, enfrentando al sindicato propatronal Uatre, y luego de años de atropellos y engaños sindicales, políticos y patronales, salieron a las calles y rutas con temperaturas bajo cero a reclamar por aumento de salarios,  el pago de la zona desfavorable (zona fría) y por otras reivindicaciones pendientes. Pasando por encima de la burocracia sindical, los y las trabajadoras en asambleas por establecimientos votaron comenzar un plan de lucha y salir a las calles. “La ganamos en las calles” es la consigna levantada y defendida.

Los municipales de varias ciudades siguen la lucha contra la ofensiva de las intendencias que quieren hacer recaer la crisis que enfrentan sobre los trabajadores. Dos de ellas son la de Córdoba y la de la ciudad de Mendoza, que desde los dos lados de la “grieta” golpean sobre los salarios, los puestos de trabajo y los derechos de los trabajadores. En Mendoza, por los reclamos y en repudio a la represión del gobierno, hace unos día se realizó una masiva manifestación donde participaron más de 2000 trabajadores y en Córdoba se mantiene las medidas de lucha contra la ofensiva antiobrera del intendente Martín Llaryora.

La organización obrera

En este marco, la Coordinadora Sindical Clasista (CSC) y las agrupaciones que la integran se han lanzado a una amplia tarea de organización del activismo obrero con la realización de importantes plenarios llevados a cabo en las dificultosas condiciones de la cuarentena.

En la  la Ciudad de Buenos Aires se realizó un Plenario de la CSC con la participación de más de 200 compañeros que participaron de las intervenciones y testimonios de los protagonistas de las principales luchas del momento en la Ciudad. Allí se votaron una declaración política, una campaña por 1.000 firmas en apoyo al proyecto del FIT-U por el impuesto a las grandes fortunas y una campaña por el tema del teletrabajo, entre muchas otras.

El pasado sábado 4 de julio sesionó el plenario de la CSC de Córdoba donde participaron compañeros de todas las agrupaciones sindicales que conforman la coordinadora: la Fucsia del Suoem (municipales de la capital), Tribuna Docente, Tribuna de Salud, Frente Docentes en Lucha, La Naranja Estatales, Agrupación de Trabajadores de Reparto, Prestadorxs Precarizadxs y el Polo Obrero. También participaron activistas y delegados del Sutna (neumático), el Sindicato de Municipales de Jesús María, trabajadorxs de Luz y Fuerza y empleadas domésticas. Fue un plenario de luchadores que dio cuenta de la activa intervención de la CSC en los principales conflictos obreros que atraviesan la provincia.

En el cuadro de múltiples luchas que recorren toda la provincia y una enorme cantidad de sectores sindicales, donde el activismo juega un rol fundamental, en la reunión se decidió convocar a un plenario obrero provincial para unificar las luchas, que se llevará a cabo el 25 de julio, con la participación de Néstor Pitrola.

Con alrededor de 50 compañeres se realizó a principios de julio un gran plenario con judiciales de distintos rincones del país que votó medidas de organización y lucha de los trabajadores judiciales. Unos días antes se llevó a cabo un plenario de la Coordinadora Sindical Clasista de La Plata, Berisso y Ensenada con la participación de un centenar de trabajadores estatales, docentes, de la salud, del Astillero Río Santiago, de las apps de reparto, del Polo Obrero, docentes universitarios, artistas y del movimiento ambiental.

La convocatoria estuvo precedida por una charla abierta realizada el 24 por la agrupación Tribuna de la Salud, que reunió a trabajadores de distintos hospitales y clínicas de la región y una numerosa asamblea de artistas organizada por las agrupaciones de la CSC.

Así se prepara e interviene el clasismo en la lucha que se ha abierto ante la crisis presente y la profundización de la misma que se vendrá en el próximo período. Se trata de ganar al activismo que está surgiendo a la independencia política respecto del nacionalismo.

Para que la crisis no la paguen los trabajadores.