Políticas
30/7/2024
Con un spot, Bullrich confirma que la causa contra el Polo Obrero fue armada por el gobierno para persecución política
Un ataque contra todo el movimiento popular.
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La ministra.
Patricia Bullrich publicó un video en el que se la ve celebrando con mentiras e infamias la persecución a Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero, y a otros referentes del movimiento piquetero. Es una confesión de que los procesamientos dictados por el juez Sebastián Casanello en la causa trucha contra los militantes populares fueron hechos al servicio de la persecución política del gobierno hambreador contra los luchadores.
“Hoy no hay piquetes”, dice la ministra, confirmando que la campaña judicial libertaria apunta a desbaratar la organización de los trabajadores, particularmente de su sector más combativo: el movimiento piquetero. Milei y Bullrich quieren atemorizar a la población para que no se subleve contra su política ajustadora, que produjo un aumento brutal tanto de la pobreza como de la indigencia.
Bullrich señala que “trabajamos en equipo con Sandra Pettovello y se sabe que el dinero de tus impuestos se iba a Belliboni”, dice la ministra de Seguridad. Las infamias de Bullrich no podrán tapar nunca que el dinero de los impuestos de los trabajadores no contribuye al enriquecimiento de Belliboni sino más bien al de los capitalistas, los acreedores internacionales y a los representantes políticos de la clase capitalista. Por otra parte, quien sí tiene un patrimonio millonario es una de las responsables de la debacle social y económica de Argentina: ella misma.
Su espaldarazo a Pettovello evidencia que la ministra es procorrupción. Es que Pettovello está envuelta en casos de corruptela: sobresueldos, contratación de ñoquis y desvió de fondos de alimentos para beneficiar a la OEI. Bullrich se presenta como adalid de los pobres pero al bancar a Pettovello –y nadie esperaba otra cosa– se está pronunciando a favor de una política de destrucción social contra los pobres; Pettovello es la ministra que mantiene adrede 6 millones de kilos de alimentos guardados en galpones mientras miles y miles de personas mueren de hambre.
A la vez, Casanello se negó a llamar a indagatoria a los funcionarios de Desarrollo Social, lo que muestra que la movida del gobierno y la Justicia apunta a atacar a las organizaciones independientes que luchan.
Bullrich señala, a su vez, que los piqueteros “hacían marchas diciendo que la gente pobre se moría de hambre mientras ellos se enriquecían”. Otra vez, la ministra tendría que mostrar en qué consistió ese proceso de enriquecimiento personal de los dirigentes sociales procesados. No podría. Belliboni y el resto viven como un trabajador promedio.
Bien distinto, por ejemplo, es el caso de Bullrich, quien vive del Estado hace décadas; gobernó con De la Rúa, Macri y ahora es parte del gobierno de Milei. Se hizo millonaria ejerciendo el poder para los ricos y los capitalistas que saquean al país y viven del trabajo ajeno y aplicando programas de ajuste que empobrecieron a buena parte del pueblo.
Los trabajadores se movilizan para rechazar las políticas ajustadoras de los gobiernos y porque no toleran más un estado de cosas que les es profundamente hostil. El Polo Obrero es una organización que defiende a los más oprimidos y explotados del país y sus integrantes están a la cabeza de la pelea por diversas reivindicaciones justas: acceso a la comida, al trabajo genuino y a la vivienda, por la urbanización de los barrios, por el fin del narcotráfico y la inseguridad, etc.
Bullrich, por el contrario, es responsable del crecimiento del hambre, de la desocupación, del aumento de la inseguridad y del narcotráfico; y la lista sigue.
“Eran gerentes, tenían empresas y lavaban el dinero de la gente pobre”, dice Bullrich sin ningún tipo de pruebas y cuando en la ampliación de indagatoria Belliboni se encargó de sustentar con documentos que los fondos otorgados por el Estado al Polo Obrero fueron utilizados para poner a funcionar los comedores populares.
Los promotores del lavado de dinero están, en realidad, en el gobierno. El blanqueo impulsado por Milei le permitirá a los narcos y a los grandes y verdaderos delincuentes del país legalizar su dinero espurio. Ciertos personeros del Ejecutivo, en cambio, fueron procesados –y con sobradas pruebas– por haber orquestado negociados corruptos a costa del pueblo trabajador argentino, como Caputo y Sturzenegger.
Quedó demostrado que Bullrich distorsiona la realidad y solo busca avanzar en el encarcelamiento de luchadores populares. El gobierno de Milei quiere derrotar al movimiento piquetero porque es el sector que viene estando a la cabeza de la pelea contra las políticas de la clase capitalista y sus políticos y que si se une al movimiento obrero ocupado en una acción unificada de lucha puede poner contra las cuerdas al elenco libertario antiobrero.
“En los próximos días presentaremos la apelación pidiendo la nulidad de estos procesamientos vergonzosos. La lucha contra esta causa entra en una nueva etapa y vamos a darla como parte de la gran lucha contra el hambre y por las libertades democráticas y el derecho a la protesta que quieren pisotear tanto Bullrich y Milei como todo el Poder Judicial”, dice el comunicado al respecto de los procesamientos de Casanello.
El Polo Obrero hizo una conferencia de prensa para responder las infamias del gobierno y la Justicia adicta.
Como señaló Solano en la conferencia, “los piquetes no se acabaron; el pueblo se tiene que defender en la calle, no van a lograr doblegarlo porque se está muriendo de hambre y está sufriendo agresiones sistemáticas y lo de Bullrich va a ser finalmente un búmeran contra ella y su gobierno”.
Arriba la lucha del movimiento piquetero.